Lo que siguió fue una gran polémica: los famosos mencionados junto a varios de sus colegas salieron a desmentir los dichos de Jaitt y dispararon crÃticas durÃsimas contra la diva por haber permitido tales acusaciones en su programa.
Lejos de defender a su invitada, Mirtha reveló –primero indirectamente y luego en su ciclo– que ella se oponÃa rotundamente a que Natacha se siente en su mesa.
“En primer lugar quiero pedir disculpas a las personas que han sido mencionadas que pudieron haberse sentido agraviadas o difamadas por las expresiones vertidas realizadas por una invitada en el programa del sábado pasado. Esas expresiones no son compartidas por mÃ, en lo absoluto, ni por mi producción, ni por el canal, y corren exclusivamente por cuenta de quien las dijo”, aseguró la diva en su ciclo a la semana del escándalo.
“Se invitó a esta señora (Natacha) y yo me oponÃa a que se la invitara, terminantemente. No era una figura para mi programa, una semana difÃcil, no encontrábamos gente, y finalmente cayó el nombre de esta persona y me convencieron. Fue un error; estoy totalmente arrepentida.Me duele que haya nombrado a gente que yo quiero muchÃsimo, o los haya mencionado o insinuado. El programa se me fue de las manos”, agregó.
El descargo no cayó para nada bien a Natacha Jaitt y aprovechó –luego de su paso por la Justicia para aportar pruebas– que la diva y su nieto le pidan disculpas públicamente. “Exijo que la Sra. Mirtha Legrand y Nacho Viale me pidan PERDÓN PÚBLICAMENTE. Primer aviso“, escribió en su cuenta de Twitter.