Esta mañana, el gobernador recibió de manos de la comisión redactora constituida para el fin, el proyecto de nuevo Código Procesal Civil y Comercial de la Provincia. La iniciativa comprende modificaciones en el área de Familia, tendientes a acelerar ciertas gestiones.
En ese contexto, el gobernador opinó que “muchas veces se prioriza el trámite, el proceso, la formalidad, la burocracia, por encima de los derechos fundamentales de las personas, y hay casos en los que el tiempo de resolución de las cosas es clave”. Dicho esto, fue consultado sobre Kiki y la familia Gigliotti- Morla, y si podía considerarse entre esos casos que el mandatario describía. Miguel Lifschitz reconoció que así era, y tras ello opinó por primera vez al respecto.
“Kiki es un buen ejemplo de cómo la demora de la Justicia produce daños a terceras personas, al niño, a sus padres solidarios...”, comenzó. No obstante, aclaró que a su entender se trata de “procesos complejos donde intervienen distintos factores y que tienen una parte traumática”.
“Hay que tratar de encontrar las soluciones más humanas y rápidas posibles. Esa es una responsabilidad del Estado, pero la Justicia también tiene una responsabilidad importante”, continuó.
Además, pidió tener en cuenta que “hay cientos de casos donde (el sistema) ha funcionado perfectamente”, pero en otros hay que tomar una resolución “que escapa al proceso establecido” (en referencia al régimen de Familias Solidarias).
Pero en cualquier caso, insistió: “La justicia ha tomado definiciones y tenemos que ser respetuosos de (ellas)”.
