También puede ocurrir la picadura de una raya. Y, aunque es poco habitual, también han aparecido en distintas oportunidades yacarés, que no atacan a las personas pero causan asombro y temor en los bañistas.
Por fortuna, hasta el momento los 93 guardavidas encargados de custodiar las playas registraron sólo un caso de picadura de raya, ocurrido el miércoles pasado. “La víctima fue un hombre, en la zona del Espigón II”, detalló Gustavo Martínez, coordinador del operativo de seguridad en verano en las playas de la ciudad, quien destacó que “hasta el momento no tuvimos ningún ataque de palometas”.
Fuente: El Litoral
Fuente: El Litoral