“Asumimos una decisión política de no parar la obra pública, de pagar la cláusula gatillo, de pagar el 82 por ciento móvil a los jubilados”, ratificó Lifschitz. La cláusula se activa y actualiza con las mediciones del Instituto Provincial de Estadística y Censos (IPEC).
“El peronismo va a recibir una muy buena herencia, pero no espero que quien asuma elogie la gestión anterior, vamos a dejar una provincia con cuentas ordenadas”, prometió el gobernador que este 10 de diciembre asumirá como diputado provincial y liderará el bloque mayoritario de la Cámara baja.
Con todo, no le quitó gravedad al presente económico: “(El ministro de Hacienda Gonzalo) Saglione está más preocupado que nunca porque en estos procesos de devaluación, se desata la inflación. La devaluación se traslada a precios y ya vemos cómo supermercados remarcan, mayoristas retiran productos. Cuando la gente está apretada no paga impuestos, tasas, ni tarifas y va a repercutir no solo en la Provincia sino en los Municipios”.
En ta sentido, reclamó al gobierno nacional “una gran dosis de humildad y prudencia”.
Consultado sobre los resultados del domingo pasado, Lifschitz no se mostró sorprendido por la victoria de la fórmula Alberto Fernández-Cristina Fernández pero sí por la distancia que le sacó al oficialismo de Mauricio Macri-Miguel Pichetto.
Pero advirtió: “Formalmente el tema no está cerrado y hay que esperar a octubre, no solo se elige presidente sino legisladores nacionales que también es muy importante”. Destacó, además que Roberto Lavagna, que encabeza la fórmula presidencial de Consenso Federal, todavía tiene margen para crecer y “se va a convertir en los próximos meses en un actor fundamental”: “Creo que puede ser una figura que genere muchas adhesiones de aquí a octubre, tenemos expectativa con esto”.
“Hoy lo mencionan todos, todos hablan bien de él porque reconocen su capacidad, su experiencia, su prudencia y expertise en el manejo de la economía en momentos críticos como los que atraviesa la Argentina”, dijo.
Fuente: Rosario3.com