El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, anunció medidas más estrictas para la el control de armas de fuego y casi en seguida subió el consumo en ese rubro.
Puede que haya sido por las imágenes impactantes de la toma del Capitolio, ocurrida el 6 de enero pasado por parte de un grupo de adeptos a Donald Trump, o porque el presidente Joe Biden anunció que habrá más controles para compradores y tenedores de armas de fuego en Estados Unidos, pero el público se apuró a adquirir rifles y pistolas y el sector registró un récord de consumo.
Los comercios en Estados Unidos vendieron más de 2 millones de armas de fuego durante enero, lo que representa un aumento del 75% sobre los 1,2 millones de armas que se comercializaron en ese mismo mes de 2020, según un informe de la Federación Nacional de Deportes de Tiro (NSSF, por sus siglas en inglés), divulgado por la cadena de noticias CNN.
Mientras tanto el FBI realizó 4,3 millones de verificaciones de antecedentes para la compra de armas en enero, una cifra que también es récord, informaron desde el ente gubernamental.
La NSSF comparó las verificaciones de antecedentes reportadas con cifras de ventas reales para obtener datos más precisos del comercio de armas: tres de las 10 semanas con más verificaciones instantáneas de antecedentes penales por parte del FBI fueron en enero de 2021.
De acuerdo con el registro del FBI, sólo hay otros tres meses en los que hubo una mayor cantidad de verificaciones de antecedentes de armas por parte de ese ente: el primero fue en enero de 2013, cuando Barack Obama asumió su segundo mandato tras la masacre en la escuela primaria Sandy Hook, y los otros dos fueron junio y julio de 2020, después del asesinato de George Floyd perpetrado por la Policía de Minesota.
Mark Oliva, vocero de la NSSF, explicó el fenómeno actual en que la retórica de campaña del presidente, Joe Biden, dejó a algunos propietarios de armas de fuego con temor a perder su capacidad de comprar más armamento y municiones.
"Ellos van a actuar mientras puedan para poder comprar lo que quieran", dijo Oliva a CNN Business.
Para el vocero de la NSSF el récord de venta de armas a particulares en Estados Unidos se explica en la victoria demócrata en la Casa Blanca tras cuatro años de gobierno del republicano Donald Trump, y en las escenas caóticas del 6 de enero pasado, cuando adeptos del ahora ex Presidente invadieron el Capitolio en Washington DC.
Por su parte Brandon Wexler, propietario de una tienda de armas en Delray Beach, Florida, las ventas de armas en su tienda fueron "inusuales" desde que comenzó la pandemia en marzo pasado.
Wexler señaló que las compras alcanzaron su punto máximo a principios de enero, cuando los clientes expresaron ansiedad por la asunción de Joe Biden. "Creo que había temor a disturbios a ambos lados de la valla. El miedo aumentó la demanda. La demanda aumentó las ventas", opinó.
El récord de enero se da después de un 2020 que registró la mayor cantidad de ventas de armas en Estados Unidos.
El FBI realizó un estimado de 39,7 millones de verificaciones de antecedentes instantáneas relacionadas con armas el año pasado, lo que superó el récord anterior de más de 27 millones de verificaciones en 2016. Justamente, el año en que muchos esperaban que Hillary Clinton, una demócrata a favor del control de armas, ganara la Casa Blanca.
Tanto Oliva como Wexler sostienen que los intentos por aumentar el control de armas conducen a incrementos en las ventas.
"Obama fue el mejor vendedor de armas del país. El covid-19 fue el siguiente mejor. Y ahora creo que Joe Biden será el mejor vendedor de armas", confió.
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