La situación ambiental no ayuda y los seres humanos tampoco. Esa es la conclusión que puede sacarse de la incontable cantidad de focos ígneos que se observan por estas horas en la provincia y la ciudad.
“Estamos en un momento complicado porque el clima, con las altas temperaturas, más la bajante del río y el poco porcentaje de humedad hacen que cada incendio sea de gran magnitud”, indicó el director provincial de Protección Civil Zona Norte, Jorge Nicollier.
Luego, agregó: “claramente, hay una mano humana en el 90 por ciento de los casos”. Y ejemplificó: “una botella que puede producir ‘efecto lupa’, no llegó caminando; o un vehículo estacionado en la banquina que larga una chispa, puede generar fuego”.
Además, no descartó intencionalidad, fundamentalmente en vecinos que prenden basura o pastizales. “En otras circunstancias no pasaría de un pequeño fuego”, pero actualmente la situación es otra.
Finalmente, pidió a los santafesinos que llamen a los bomberos o al 911 si ven a alguien iniciando un foco ígneo.
Fuente: SFA/RU
.jpg)
0 Comentarios