Comienzan los alegatos y se aguarda saber si el fiscal acusarĂ¡ o no al viudo

Se reiniciarĂ¡ la 39na. audiencia del juicio por jurados por el crimen de Nora Dalmasso, que tiene como Ăºnico imputado a MacarrĂ³n, quien llegĂ³ a juicio acusado del delito de homicidio calificado por el vĂ­nculo.


Los alegatos en el juicio por el crimen de Nora Dalmasso, cometido en noviembre de 2002 en la ciudad cordobesa de RĂ­o Cuarto, comenzarĂ¡n este martes con la exposiciĂ³n de la fiscalĂ­a, que darĂ¡ a conocer si acusarĂ¡ o no al viudo Marcelo MacarrĂ³n por el femicidio.

Tras un cuarto intermedio dispuesto el pasado 22 de junio, a las 9 se reiniciarĂ¡ la 39na. audiencia del juicio por jurados por el crimen de Dalmasso (51), que tiene como Ăºnico acusado a MacarrĂ³n (62).

La jornada judicial comenzarĂ¡ con la consulta del tribunal tĂ©cnico a la fiscalĂ­a y la defensa para que informen si van a producir mĂ¡s pruebas y, en caso de que den por concluida esa instancia, se avanzarĂ¡ con la exposiciĂ³n de los alegatos.

El viudo MacarrĂ³n llegĂ³ a juicio acusado del delito de "homicidio calificado por el vĂ­nculo, por alevosĂ­a y por precio o promesa remuneratoria en concurso ideal", segĂºn las conclusiones del fiscal Luis Pizarro, el Ăºltimo que instruyĂ³ la causa y la elevĂ³ a juicio.

Durante todo el proceso de enjuiciamiento, que comenzĂ³ el 14 de marzo, el fiscal Julio Rivero no hizo valoraciones sobre la calidad de los elementos probatorios testimoniales y documentales que se expusieron en el debate oral y pĂºblico, por lo tanto se desconoce el contenido de sus alegatos.

El manual instructivo para Jurados Populares, establecido por la Ley Provincial Nº 9182 Poder Judicial de CĂ³rdoba, sostiene que “si el fiscal de CĂ¡mara, durante su alegato final, no mantiene la acusaciĂ³n y pide la absoluciĂ³n del imputado, el tribunal no puede condenar, salvo que intervenga en el juicio el querellante particular y que Ă©ste, en su alegato, haya pedido la condena”.

En este juicio no hay querellantes, por lo tanto si el fiscal Rivero no mantiene la acusaciĂ³n y pide la absoluciĂ³n, el jurado no podrĂ¡ deliberar porque no se cumplen los requisitos establecidos para que el tribunal condene en caso considerar a MacarrĂ³n culpable.

Durante todo el proceso de enjuiciamiento, que comenzĂ³ el 14 de marzo, el fiscal Julio Rivero no hizo valoraciones sobre la calidad de los elementos probatorios testimoniales y documentales que se expusieron en el debate oral y pĂºblico, por lo tanto se desconoce el contenido de sus alegatos.

El fiscal Pizarro, al elevar el caso a juicio, considerĂ³ que la madrugada del 25 de noviembre del 2006 el viudo "planificĂ³ dar muerte a su esposa por desavenencias matrimoniales y con la intenciĂ³n por parte de su/s adlater/es de obtener una ventaja, probablemente polĂ­tica y/o econĂ³mica".

La sospecha del fiscal es que el traumatĂ³logo "le suministrĂ³ (a un sicario) informaciĂ³n del movimiento de la casa y presumiblemente le entregĂ³ un juego de llaves", y que "eligiĂ³ como fecha" el Ăºltimo fin de semana de noviembre de ese año "en el que se disputarĂ­a un torneo de golf" en Punta del Este, al que concurriĂ³ con sus amigos "con la finalidad del Ă©xito de su plan delictivo y despejar cualquier posibilidad de sospecha sobre su persona".

En base al relato de testigos, el representante del Ministerio PĂºblico estableciĂ³ que, para llevar a cabo el crimen, el sicario contratado "aguardĂ³ que la vĂ­ctima realice su rutina previa al descanso y la abordĂ³ una vez que Ă©sta se encontraba dormida en la habitaciĂ³n de su hija, ubicada en la planta alta de la vivienda".

La sospecha es que el agresor sorprendiĂ³ a Nora, la tomĂ³ del cuello "ejerciendo una fuerte presiĂ³n con sus manos, anulando asĂ­ toda posibilidad de defensa", tras lo cual "utilizĂ³ el cinto de toalla de la bata de baño que se encontraba en la habitaciĂ³n, realizando un ajustado doble lazo alrededor del cuello, ocasionando la muerte por asfixia mecĂ¡nica".

"Al final, probablemente y como parte del plan criminal, ordenĂ³ la escena con la finalidad de simular un hecho de Ă­ndole sexual, tras lo cual se retirĂ³ del lugar, sin dejar rastro alguno de su persona", segĂºn el fiscal de instrucciĂ³n.

De acuerdo con los datos que constan en el expediente, para el fiscal no caben dudas de que el crimen fue cometido por "un agresor especializado, un sicario" que nunca fue identificado ni detenido, que "sexualizĂ³ la escena del crimen a efectos de que parezca que el mismo se produjo en el contexto de un encuentro sexual con el amante".


Fuente / TĂ©lam

Publicar un comentario

0 Comentarios