El hijo del matrimonio asesinado en agosto en Vicente López insistió en que es inocente y pidió "saber quién y cómo y cuándo" mataron a sus padres.
Martín Del Río, el comerciante detenido como presunto autor del asesinato de sus padres en la localidad bonaerense de Vicente López, aseguró desde su lugar de detención que es "inocente" y que lo están acusando del "peor delito de toda la historia".
Del Río, de 47 años, expresó en un mensaje de audio al que Télam accedió a través de su abogada, Mónica Chirivin, que es inocente por el doble homicidio ocurrido el 24 de agosto en la casa ubicada sobre la calle Melo 1101 de Vicente López.
"Hola, buenas noches. Soy Martín Del Río. Soy inocente. Me están acusando del peor delito de toda la historia", expresó el principal sospechoso por el doble homicidio cuádruplemente agravado de sus padres, José Enrique Del Río, de 75 años, y María Mercedes Alonso, de 72.
"Soy inocente y quiero saber quién, y cómo, y cuándo mataron a mis padres. Muchas gracias", insistió en el audio.
Este lunes también salió a la luz una serie de videos de una inspección ocular que los tres fiscales y la Policía Científica realizaron junto a Del Río cuando él era testigo de la causa judicial y la única detenida era la empleada de las víctimas, María Ninfa "Nina" Aquino, quien fue la que encontró los cuerpos del matrimonio todavía sentados en su auto en el garaje de la casa.
Las imágenes, a las que accedió Télam, datan del 27 de agosto, tres días de que se produjera el doble homicidio en Vicente López.
En la grabación se ve a Del Río cuando recorrió la casa de sus padres con los fiscales para explicarles cuestiones como el funcionamiento de la alarma de la propiedad, entre otros detalles.
En algunos de los ambientes se observa algo de desorden, pero según la hipótesis de los fiscales, fue montado por Del Río para desviar la investigación y hacer pensar que se había tratado de un homicidio en ocasión de robo.
También se ve el balazo que el asesino efectuó en uno de los almohadones de un sillón -supuestamente para probar el arma-, y el garaje con el auto Mercedes Benz donde las víctimas estaban con el cinturón de seguridad colocado y listas para salir y fueron ejecutadas desde el asiento trasero.
Martín Del Río siguió un "plan previamente diagramado"
Del Río padre y su esposa aparecieron asesinados -él de tres balazos y ella de uno- el pasado 25 de agosto en el interior de su automóvil en el garaje de su casona de la calle Melo 1101, de Vicente López.
Si bien la empleada de la casa, "Nina" Aquino, fue la primera detenida como presunta "entregadora", el juez de la causa la liberó por falta de pruebas y el 7 de septiembre los fiscales detuvieron al hijo menor de los fallecidos, Martín, como supuesto autor de un doble parricidio.
Para los fiscales Martín Gómez, Alejandro Musso y Marcela Semería Del Río asesinó a sus padres en algún momento entre las 17.33 y las 18.30 del 24 de agosto y lo hizo con un "plan previamente diagramado", lo que sería un agravante para la pena en caso de ser declarado culpable.
Primero les pidió que se subiesen a su auto, un Mercedes Benz, y luego les disparó desde el asiento trasero con una pistola calibre 9 milímetros.
Luego, Del Río hijo robó el DVR con las grabaciones de las cámaras de seguridad y montó en la casa de sus padres una escena caótica para que pareciera un homicidio en ocasión de robo.
En base a prueba fílmica, tecnológica y testimonial recopilada por la fiscalía, el juez Costa dictó el 7 de este mes la prisión preventiva de Del Río como autor de un "doble homicidio calificado por alevosía, por el vínculo, por el uso de arma de fuego y por ser criminis causa" (matar para lograr la impunidad), delito que prevé como única pena la prisión perpetua.
Para los fiscales el móvil fue económico y está vinculado a los desmanejos financieros del imputado con los bienes y negocios familiares y una operación inmobiliaria que Del Río hijo nunca pudo concretar por la que sus padres pensaban que ese 25 de agosto iban a mudarse a un lujoso departamento del barrio porteño de Núñez valuado en más de U$S 1,5 millones.
La defensora Chirivin apeló hace dos semanas la prisión preventiva de Del Río ante la Cámara de San Isidro al cuestionar, entre otros puntos, el cambio de la data de muerte de las víctimas, la testimonial de la amante y los reconocimientos que lo identificaron como el "caminante encapuchado" que el presunto asesino.
A su vez, pidió que su cliente sea beneficiado con una prisión domiciliaria con tobillera por sus problemas de diabetes, hipertensión y colesterol.
Los fiscales de la causa realizaron el domingo pasado otra inspección ocular en una casa que el imputado había alquilado a dos cuadras y media de la escena del crimen, sobre la calle Haedo al 900 de Vicente López, en búsqueda de alguna evidencia, pero no se encontró nada de interés.
Próximos pasos en la investigación por el doble homicidio en Vicente López
En los próximos días, los investigadores podrían volver también a recorrer el domicilio de los Del Río en Vicente López y su casa de fin de semana en el country San Diego de Moreno.
También en estos días el equipo de fiscales de Vicente López ordenó una serie de peritajes para intentar obtener evidencia científica: ADN sobre el eventual material genético que se halle bajo las uñas de las víctimas (por si alguno llegó a arañar al asesino), cotejos balísticos con las vainas y proyectiles secuestrados en la escena y las autopsias y el análisis del distinto tipo de calzado del imputado.
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