Las ventas del disco rondaron los 65 millones de unidades en todo el mundo, convirtiéndose en un fenómeno de masas.
Una puerta chirriante se abre, tan lentamente que oírla incomoda. Alguien camina, se cuentan 13 pasos mientras se oyen truenos, lluvia y el aullido de un lobo.
El dramatismo del teclado se une al de la batería y comienza a sonar Thriller.
El lobo sigue aullando, lo hace con más fuerza. Ahora se escucha la letra y luego el pegajoso coro: Cause this is thriller/ thriller night/ and no one’s gonna save you / from the beast about strike/ You know it’s thriller/ thriller night/ you’re fighting for your life/ inside a killer/ thriller tonight/ yeah.
Si el inicio fue novedoso para la época, el final no podía ser diferente. Una voz, casi de ultratumba, recita que la oscuridad cae sobre la tierra, la medianoche está cerca y las criaturas se arrastran en busca de sangre.
Así hasta terminar hablando de la maldad del miedo. Después de esta retahíla terrorífica llega la famosa risa macabra, y ahí termina la canción.
Thriller, como se llama el tema y el álbum, es considerada la obra maestra de Michael Jackson. Era 30 de noviembre cuando la lanzaron, hace 35 años.
