El hombre fue denunciado por la DAIA ante el Juzgado Nacional en lo Criminal y Correccional Federal N°12 a cargo de Ariel Lijo. Se secuestraron equipos de comunicación, un arma de aire comprimido y municiones de 9mm, entre otras cosas.
La Policía Federal detuvo en San Isidro a un hombre antisemita que realizaba amenazas por redes sociales. El mismo fue denunciado por la Delegación de Asociaciones Israelitas Argentinas (DAIA) y al momento de su arresto le encontraron un arsenal de armas en su casa.
La denuncia fue presentada el 12 de octubre ante el Juzgado Nacional en lo Criminal y Correccional Federal N°12 a cargo de Ariel Lijo y tras una investigación del Departamento Unidad De Investigación Antiterrorista, dependiente de la Superintendencia de Investigaciones Federales se pudo identificar al usuario de la red social.
“Cuando lo detuvieron encontraron que dentro de los autos en que él se movía tenía un arma de aire comprimido, binoculares, varias navajas y cuchillos de todo tipo y municiones de calibre 9 mm”, describió el periodista de C5N.
También se descubrieron equipos de comunicación estilo handy, varios pen drive, la mira de un rifle y un detector de radar. A raíz de su arresto se procedió a investigar todas las antenas y celulares secuestrados para saber si era sólo una cuestión de amenazas o existe una organización detrás.
“Yo sé que mi hijo es inocente”, declaró bajo juramento el padre del joven. En tanto, el acusado de 18 años aseguró que le hackearon sus cuentas y que es posible que alguien le haya utilizado su IP. Que en su casa comparten la clave cuando van amigos, y también piensa que algún vecino puede haber utilizado las claves.
Trabaja en un taller mecánico del bajo San Isidro. “Gracias a dios mis padres me dan comida y techo”, dijo en su indagatoria, según fuentes judiciales.
En su descargo, el acusado afirmó que “los mails que me dijeron no son míos. Yo trabajo y estudio. Desde las 6:30 a las 13:00 voy trabajar. Luego, estudio de 13:30 a 22:00 horas si es doble jornada”.
“Los mails no son los que yo uso. Tengo otros correos electrónicos que utilizo habitualmente y otro que uso para juegos y cine y esas cosas. Cuando inició el allanamiento, tanto mi familia como yo, aportamos las claves necesarias. Eso lo hice para que sea más rápido el proceso y demostrar que yo no tenía nada que ver”, agregó.
Fuente C5N
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