Eduardo Domínguez se juntó el pasado viernes con los dirigentes de Colón, luego de la derrota frente a Vélez, y les comunió que una vez que el equipo termine su participación en la Superliga daría un paso al costado como entrenador.
En ese momento José Vignatti y sus pares de Comisión Directiva tenían pensado el mismo final para el ciclo de Domínguez en el club, ya que no esaban conformes con la actuación del equipo, ya que a su entender no había relación entre el esfuerzo que hicieron para potenciar el plantel y la posición que el equipo ocupaba en el campeonato.
Pero el equipo logró su mejor actuación en lo que va de la temporada, le ganó una final a Racing, que pretendía clasificarse a la Libertadores, y de esa manera consiguió su boleto para disputar la Sudamericana del año que viene.
Vignatti estuvo en Capital Federal tratando diversos temas vinculados a la institución, y luego asisitió al Cilindro de Avellaneda. Si bien el presidente sostiene que el ciclo de Domínguez está terminado, le demandaría una cifra millonaria para dejarlo marchar.
En concreto, el máximo titular sabalero le demandaría una cifra cercana a los 300.000 dólares para que el DT pueda romper su vínculo unilateralmente. Vale recordar que Colón todavía sostiene un conflicto a través de la FIFA con Paolo Montero, quien en diciembre del 2016 decidió dejar a Colón para dirigir a Rosario Central.
Domínguez es uno de los grandes candidatos a dirigir al Emelec de Ecuador, mientras que también en La Plata se maneja la información que es el principal candidato de Juan Sebastián Verón para hacerse cargo de Estudiantes.
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