Recursos para seguridad: el Gobierno sostiene que la mitad fueron para Santa Fe

 



Aníbal Fernández estuvo en Diputados y defendió la actuación oficial, aún en contra de la mirada crítica del peronismo de Omar Perotti.

El ministro de Seguridad estuvo ante los legisladores un día después de su viaje a Rosario, adonde llegó para dar el paso simbólico de la llegada a la ciudad de los 300 gendarmes y 100 efectivos de la Policía Federal, un número que irá escalando hasta completar la suma de 1.400 nuevos agentes.


«Más de la mitad de los recursos destinados a seguridad se enviaron a Santa Fe», dijo Aníbal Fernández. Detalló que, de un total de 17.000 millones de pesos, «8.875 mil millones fueron a Santa Fe y en su mayoría a la ciudad de Rosario», que atraviesa en las últimas semanas una ola de violencia derivada de las actividades del narco.

El ministro señaló estos conceptos en la comisión de Seguridad Interior en el Congreso Nacional, presidida por el diputado del Frente de Todos Ramiro Gutiérrez,, donde expuso por más de cinco horas. Contestó preguntas del oficialismo y de la oposición, sobre el aumento de los delitos del narcotráfico en la ciudad santafesina.

«Yo no me rindo, al contrario, peleo todos los días por lo que necesito y lo que creo», le respondió al diputado del Pro Federico Angelici, que cuestionó su reciente declaración a los medios de comunicación donde el ministro dijo que «los narcos han ganado».

Aníbal Fernández recordó que apenas asumió en su cargo, en septiembre de 2021, recibió al gobernador de Santa Fe, Omar Perotti, «para poder hacer una presencia inmediata en la provincia, puntualmente en Rosario» y precisó que se desarrolló «una estrategia, presentando 575 efectivos, con gente con mucha experiencia para poder hacer allanamientos».

También afirmó que en Rosario hay «4093 efectivos que son de las cuatro fuerzas y en toda la provincia hay 5834», al responder una consulta del diputado radical y vicepresidente de la comisión, el radical Juan Martín. El legislador santafesino afirmó que Santa Fe «está en el puesto 14 de inversión en seguridad».

En ese sentido detalló que «la participación que tiene Gendarmería Nacional en 2019 es de 4.8 % de la ejecución, llegando a 2023 a 1.3%» y señaló que «si tomamos todas las fuerzas, el promedio total pasó de 2.4 % a 1.2 %».

Además, el legislador de JxC santafesino le consultó si era «prioridad la provincia de Santa Fe». Fernández respondió que «la prioridad que tenemos es la de cualquiera de las 23 jurisdicciones y la Ciudad Autónoma de Buenos Aires. Son 2.780.400 kilómetros cuadrados a los que estamos dedicados».

«Las prioridades en pesos que mostramos son las que salen del Sistema Nacional de Estadística Criminal que la aportan las provincias, no la invento yo ese dato, lo hacen llegar las provincias», agregó.

Desde el oficialismo, el diputado santafesino Roberto Mirabella dijo que «no podemos pasarnos facturas, tenemos que tener una mirada compartida para ver cómo enfrentamos esto» porque «acá están en riesgo cuarenta años de democracia».

«Tenemos que hacer algo porque no puede ser que sigan pasándose los celulares en las cárceles. Tenemos que tener un servicio de inteligencia criminal», agregó.

El diputado del socialismo santafecino Enrique Estévez lo consultó sobre el proyecto de fortalecimiento de la justicia santafesina. El ministro dijo que es importante que la provincia tenga «los fiscales y jueces que están necesitando, porque un juez que falta es la tarea que otro juez que se tiene que dividir en dos».

Fernández también pidió a los legisladores que sancionen el proyecto de reforma de la ley de Lavado que envió el año pasado el Gobierno nacional, ya que para combatir el narcotráfico «es más fácil seguir los fondos que atacar el producto, porque el producto se puede volver a fabricar».

Además, respondió una crítica del jefe de diputados del Pro, Cristian Ritondo. Fernández dijo que se armará «un comando unificado de fuerzas federales en el conurbano bonaerense, con bases operativas en La Matanza, Tigre, Pilar, Avellaneda y La Plata».

También el ministro explicó los motivos por los cuales se había rechazado utilizar las lanchas compradas por el Gobierno de Mauricio Macri al señalar que «son una porquería, que no navegan en el río ni en el mar».



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